Esta vez, traigo unos chips de maíz que podrían asimilarse con los nachos o Doritos. A excepción de que éstos son sin aceite y con ingredientes 100% naturales.
Para esta receta usé harina de maíz integral, pues contiene más fibra y ácidos grasos esenciales que la harina de maíz refinada. Sin embargo, ésta última también funciona.
Por otro lado, las semillas: ajonjolí tostado y chía. Las incluí, primero, porque me encanta el sabor que aporta el ajonjolí a la comida y, segundo, por su increíble valor nutricional.
Ahora, las especias: paprika dulce, ajo en polvo y cúrcuma. Esta combinación es brillante. El sutil dulce de la paprika (pimentón), el amarguito de la cúrcuma y el contraste con el ajo, se unen y son simplemente una explosión de sabor en boca y, además, le dan un color espectacular.
En cuanto al resultado, van a obtener unos chips crocantes, deliciosos, saludables y libres de aceite porque son horneados.
Lo único es que deben quedar bien delgados y para esto es necesaria un poco de paciencia porque puede tomar tiempo. Por lo tanto, entre más delgados, más crocantes quedarán y menos tiempo en el horno necesitarán.
Eso sí, jamás quedarán como los de paquete, pues esos son súper delgados y los fritan. Estos, por al contrario, son artesanales y quedan más gruesitos.
Lo bueno es que pueden acompañarse con guacamole (mi opción #1) o cualquier tipo de salsa. También se puede hacer un plato de “nachos” con queso, fríjoles negros, vegetales y salsas (yum). O simplemente se pueden comer solos e igualmente son deliciosos…hasta el punto de obsesionarse con ellos y comer un montón sin darse cuenta.
Ingredientes
- 1 taza de harina de maíz integral
- 2 cucharadas de ajonjolí tostado
- 1/2 cucharada de semillas de chía
- 1/2 cucharadita de paprika dulce
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- 1/2 cucharadita de cúrcuma en polvo
- Sal y pimienta
- 1 1/4 tazas de agua (o dependiendo de las instrucciones del empaque de harina)
Preparación
- Pre calienta el horno a 200C.
- En un bowl, mezcla los ingredientes secos (todo menos el agua).
- Agrega el agua y mezcla bien hasta obtener una masa homogénea.
- Pon un poco de harina sobre una tabla o superficie plana y pon la masa. Con un rodillo o un objeto cilíndrico, aplana la masa hasta obtener una lámina delgada.
- Con un cuchillo delgado, haz cortes con la forma que quieras. Yo hice triángulos. Para despegar la mezcla de la tabla o superficie, utiliza el mismo cuchillo o una espátula muy delgada.
- Pon los chips en dos (o las que necesites) bandejas o refractarias grandes con papel parafinado. Cuida que cada chip tenga su espacio, no que quede uno encima del otro.
- Hornea de 20 a 40 minutos. Esto dependerá del grosor de los chips. Puede que unos estén antes que otros.
- Deja enfriar y disfruta.